TERRITORIO Y FUTURO
Julio C. Romero Orozco
4 de Junio 2015
Son variados e interesantes los significados adyacentes a “Territorio” o aquel espacio controlado por una autoridad competente. En aquel concepto podemos identificar, en lo general: población asentada, medioambiente, sus leyes de convivencia y condicionantes para el logro de objetivos, significando con ello, la dimensión espacial de los fenómenos políticos, económicos y sociales.
A partir de lo anterior, no podemos sustraernos del Poder y de los “espacios y dimensiones” que podrían derivarse del concepto, permitiendo un panorama de tres vertientes: La política, en que el territorio es sometido a un control por determinado poder; la cultural o simbólica, en que lo territorial es un producto o apropiación de una colectividad (una construcción); y la económica o espacio concebido como fuente de recursos (Hasbaert, 1997).
La vertiginosa y desafiante evolución tecnológica – que dinamiza a la sociedad-, como también la variopinta e incierta tipología de las amenazas a la seguridad y al desarrollo, induce a pensar a la adopción de una mirada de mayor flexibilidad frente al carácter inamovible que podría proyectar el significado “territorio”. Unos pueden ser cíclicos o móviles (Sack, 1986) o ser concebidos como territorio-red, continuos y discontinuos. Según Santos (1999) “hoy la movilidad se hizo prácticamente una regla. El movimiento se sobrepone al reposo. La circulación es más creadora que la producción. Los hombres cambian de lugar como turistas o como inmigrantes. Pero también, los productos, las mercancías, las imágenes. Todo vuela. De ahí la idea de desterritorialización.”. Idea que podría proyectar una forma de destierro.
¿Qué tipo y forma de ciudad o asentamiento proponen estas visiones?
Me parece interesante la visión de “lugar” (Peyré Tartaruga) en la relación del individuo con lo cotidiano, la vivencia y la convivencia. Asimismo, toda la carga simbólica que ello conlleva, pues la velocidad de los cambios llevará consigo una propuesta de ciudad ajena a la concentración (en todos los campos), sumándose a la idea de movilidad y conexión en red. Tal vez una renovada forma de Política y ejercicio del poder