SUN TZU, LA GUERRA COMPUESTA Y EL GIRO DE LAS DOCTRINAS Y ESTRATEGIAS
Mg. Julio C. Romero Orozco
14 de junio de 2016
(Reflexión)
“Cualquiera que tenga forma puede ser definido, y cualquiera que pueda ser definido puede ser vencido” Sun Tzu, El Arte de la Guerra
No es de extrañar que el influyente filósofo haya observado y concebido la guerra desde variados puntos de vista, de acuerdo a los objetivos, tipos y magnitudes de violencia de aquella época: la disciplina, la sabiduría, la fortaleza, el lugar y otros factores que se articulan sabiamente con la naturaleza. En si, lo visible y cierto. Asimismo, dejando de manifiesto, ya hace cinco siglos aproximadamente, algo que me parece determinante en la actual dinámica social y tecnológica que contextualiza los conflictos, lo que respecta a la “forma”. Significado que alude- tradicionalmente- al enfrentamiento de fuerzas en conflicto en figuras nítidas como lo son los Estados, los ejércitos, las armas, los recursos de apoyo, los escenarios, los pueblos y las ideologías y, las propias doctrinas y estrategias, las que llenan toneladas de libros y son tema de debate de variados investigadores y Academias. Dejando ver entre líneas, los objetivos reales y aparentes de tan cruentas acciones y por otra parte (Tyler Cowen) afirmando que guerras son un factor de desarrollo y evolución tecnológica: “La ausencia de grandes conflictos internacionales entorpece el crecimiento económico, mientras que la anticipación de la guerra, en cambio, es capaz de acelerarlo”
Según The New York Times y de The Week, La guerra es el ¿El gatillo del progreso?
Bajo esta frase podríamos estar frente a un paradigma y a una visibilidad muy clara respecto a una relación entre el conflicto y la economía, identificando ejércitos regulares, teatros, y fases, tanto de guerra y de re-construcción política y económica post-guerra. Sin embargo hoy, la capacidad de “definir la amenaza para vencerla” y sus momentos, pareciera ser una tarea bastante difícil de predecir y de ejecutar. Dificultad que se reafirma con la frase del pensador chino “Luchar con otros cara a cara para conseguir en ventajas es lo más arduo del mundo” y que es adoptada por los estrategas que hoy sostienen la propuesta de paralizar la voluntad y destruir la moral utilizando la combinación de medios (materiales y no materiales) en un ambiente incierto respecto a saber quién es quién (amigo o enemigo), al escenario (preferentemente urbano), al tiempo y al ritmo (indefinido) y a la negación del momento decisivo, ante lo cual, las fuerzas regulares, la estatura estratégica y las armas convencionales parecieran no tener un protagonismo determinante.
“La sorpresa, a su vez, radica en que algunos de los Estados más avanzados en términos de RTM (Revolución Tecnológica Militar) o RMA (Revolución de Asuntos Militares) han sido incapaces de “ganar guerras” frente a enemigos manifiestamente inferiores” (Baqués, J).
Conjunto de actividades que algunos autores denominan Guerra Híbrida (El principal exponente del concepto de Guerra Hibrida es Frank Hoffman, el cual sostiene, haciendo suya una expresión de Cohen, que “las doctrinas militares convencionales del Siglo XX dirigidas contra Estados Naciones y ejércitos de masas de la era industrial están efectivamente muertas” (Hoffman, 2007), por lo cual, se podría afirmar que el propio desarrollo industrial post-moderno es co-solidario con una forma distinta de hacer la guerra, pues la vorágine de desarrollo tecnológico ha robustecido los medios materiales y fragilizado la seguridad humana, constituyendo una asimetría que plantea vulnerabilidad e inquietud en la política y en sus herramientas de seguridad, pues las fuerzas o voluntad que aplica este tipo de guerra mina y quebranta la moral del sistema decisor y de la población. Las operaciones ya no solo están dirigidas en contra de una instalación o un sistema de armas, sino que persiguen “generar confusión (o hasta desesperación) entre la población del Estado en cuestión, de modo que pueda derrotar a dicho Estado no tanto debido a una siempre difícil victoria militar, sino por medio del desencanto de los implicados. Por ello, prolongar indefinidamente una guerra de este tipo suele jugar a favor de quien ha optado por este modo de alcanzar sus objetivos” (Smith, 2007).
En el caso del conflicto Ruso-Ucraniano y Siria (siete fuerzas), se han observado actividades subversivas y clandestinas (de manera de no caer en la trampa de la legalidad/ilegalidad) de fuerzas irregulares, población y delincuentes, donde el “partisano” (Teoría de Schmitt) recibe recursos regulares y un reconocimiento político y legitimidad. “La guerra asimétrica y el apoyo en factores externos a la acción militar –como los medios de comunicación o una oposición civil interna– son determinantes para anular la ventaja estratégica del enemigo en un conflicto. El uso de fuerzas armadas se reserva para un momento clave que pueda decantar la victoria” (Guerasimov, V.)
Según mi opinión, el término de Guerra Hibrida no se condice con esta realidad conflictiva postmoderna, pues el concepto de híbrido se refiere mayormente al producto de la unión de dos individuos animales o vegetales de un mismo género pero de distinta especie. Sin embargo, también se define como producto de elementos de distinta naturaleza. A partir de ambas acepciones y técnicas (empleadas en la biología y en la tecnología) se pretende obtener un beneficio (un mejor alimento, un nuevo animal, un motor de mejor rendimiento), es decir, en un sentido positivo, un beneficio. La expresión “Guerra Compuesta” creo que define con mayor exactitud la sinergia de variados factores y medios (políticos, económicos, diplomáticos, de información, sociales, otros) para doblegar la voluntad del adversario, produciendo un escenario de gran incertidumbre, lo que ha impulsado a la OTAN a sostener que este tipo de amenazas deben ser combatidas de la misma manera.
Desde la mirada de Sun Tzu, vemos que la propuesta de una Guerra Compuesta hace que sea muy complejo “definir” la forma del enemigo (¿cuál, dónde, con qué, cómo?), ante lo cual, “hay circunstancias en la guerra en que los muchos no pueden atacar a los pocos y otras en que el débil puede dominar al fuerte”, por lo que, “el que sea capaz de manejarse en tales circunstancias saldrá victorioso”.
Por tanto, respecto a las dimensiones política, estratégica, operacional y táctica, las formas distintas de hacer la guerra (llámense como quieran) desafían a los actuales y tradicionales métodos inscritos en doctrinas y estrategias a mutar y flexibilizarse de acuerdo a la dinámica de los cambios sociales, políticos, económicos y tecnológicos, reconociendo además que las guerras llamadas hibridas o compuestas no son una novedad, pues ya Napoleón expresaba que “ a los guerrilleros a que combatirlos como guerrilleros”, ante lo cual, la batalla final ya es un objeto de decoración de la historia y el terror ya está en la puerta de nuestras casas.
“Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas” Sun Tzu
BUEN FINDE