LA INFORMÁTICA, LA ESCLAVITUD Y EL ARTE DE LAS PIRÁMIDES

LA INFORMÁTICA, LA ESCLAVITUD Y EL ARTE DE LAS PIRÁMIDES

(Observación)

Mg. Julio C. Romero Orozco

17 de junio de 2016

                           Para todos los que dimos los primeros pasos de conciencia cognitiva en imágenes o representaciones sobre
papeles, ver una pirámide y la supuesta técnica de su construcción no dejó demaravillarnos e inquietarnos.   No sólo
era el tamaño de la magnífica obra y su cuantiosa materialidad, sino que también, la complejidad de su construcción y "su gran misterio arquitectónico y divino". Construcción que aún lleva consigo un manto de variado contenido de
mitos y leyendas, impulsando a muchos autores a ensayar singulares tipos de explicaciones esotéricas y futuristas de nuestro pasado y asimismo, manifestar la expresión paradojal: "recuerdos del futuro", no sólo para basar el origen de
la humanidad en la acción de seres superiores o extraterrestres, sino que también, para legitimar un tipo de relato especulativo y cautivante.

"La pirámide de Keops tiene esta particularidad, entre otras muchas: su altura en metros multiplicada por mil millones equivale a la distancia Tierra-Sol, es decir, 149,5 millones de kilómetros" ..."no la hicieron por sus
medios los súbditos del faraón de la IV Dinastía, apuntan a la ayuda de seres de otros mundos y atlantes que les habrían transmitido los conocimientos para acometer la empresa"... Una de esas técnicas sería la del ablandamiento de la
piedra, que habría ahorrado la extracción y posterior transporte de los más de 2 millones de bloques de unas 2,5 toneladas que se calculan para la Gran Pirámide
" (Erich von Däniken, 1968).

En sí, relatos de permanente articulación y renovación de significados para intentar dar explicaciones
plausibles y pretender su validez en un mundo actual ávido de novedad. En este sentido, la tecnología en la forma de acontecimiento -la fecundidad de un concepto se revela por su capacidad para hacer visibles hechos que se escapan al sentido común (Porto Carrero)- se presenta como una particularidad, ante lo cual propone que "la lógica hegemónica, no debería existir, pero ella se revela de una manera súbita e impredecible" (Alan Badiou). Por tanto, una nueva lógica
que irrumpe (el cada vez de la tecnología) para desafiar al cambio "permanente" del imperio  de las lógicas política,
económica y social vigentes, como también, del debate seguridad/libertad.

¿No es este el relato descriptivo de nuestras "pirámides tecnológicas" en la actualidad?

                        Aunque este misterio nos ha acompañado por algunos miles de años, las diferentes percepciones de las
diferentes culturas que han sido testigos de aquellas obras, según mi opinión, no dejaron de reparar-de manera común- en los siguientes significados de contenido: magnífico, complejidad en la construcción y  variados tipos de explicaciones, los
que de manera general apuntan a un origen de elite, secreto y articulación variada de sus causas y propósito.
Características las cuales finalmente subsumen a multitudes esclavizadas en un infernal paisaje de bloques decorados por el dorado brillo del misterio y la adoración.

Posiblemente hoy, un hombre frente a un smarthphone o computador sea la proyección de un esclavo egipcio,
con su cincel y la piedra, agachando su cabeza sudorosa a modo de reverencia y sometimiento ante la gran piedra de interiores obscuros e inalcanzables. Problemática que nos puede llevar a los siguientes ( entre varios) puntos de
debate:

1.- El ordenamiento político (la tecnología como un factor de dominación y dependencia)

2.- Las relaciones interpersonales y la comunicación (la distancia usuario-generador de pirámides
tecnológicas y usuario-usuario) (No me refiero a su forma, sino a su atributo
de colosal y complejo)

3.-El tipo de contenido inserto (características lingüísticas, psicológicas y
sociales de la comunicación,
Maldonado, 1998)

Puntos que plantean la interrogante acerca de una "comunicación tecnológica" de bloques que, según mi
opinión, apuntan a la construcción de pirámides de incertidumbre y dependencia, en sí, un nuevo espacio territorial (desafío para la política, especialmente respecto a la seguridad y la libertad) donde regiría un nuevo yo, nosotros y
ellos en un mundo simulado de códigos permanentemente desechables.

"Nada me es más ajeno que una
actitud de prejuiciosa desconfianza sobre el papel de la tecnología.

Dicho esto, estoy profundamente
convencido de que las tecnologías, si se quiere tutelar su carga innovadora,
deben permanecer siempre abiertas al debate de las ideas. Dispuestas a examinar
(y reexaminar) no sólo sus presupuestos básicos, sino también, y quizás en
primer lugar, sus relaciones con la evolución de la sociedad. Pero todo esto,
ya se sabe, choca abiertamente con los intereses de aquellos que no quieren
turbar la quietud del jardín informático.

Se equivocan quienes ven la
informática como una caja de desgracias, pero también quienes la consideran una
desbordante canasta de milagros"

(Maldonado, Tomás, Crítica de la razón
informática, 1998, PAIDOS)

Buen Finde...